Quiero dar las gracias a las familias que compartieron con todos nosotros este día y nos ayudaron con el ochio y chocolate y con alguna cosilla más....
Pero lo que ellos tenían más ganas era el de poder compartir y enseñar el regalo que le habían traído los Reyes Magos.
De verdad que para todos de una forma u de otra fue un día muy emotivo.
Si que fue emotivo. Ver a mis niñas darle un gran aplauso a las seños que un día fueron mis profes. Y preparar con ilusión el día anterior los juguetes que iban a compartir con sus compañeros me hizo recordar todos los buenos momentos que he vivido en mi cole. Cada día más contenta de que mis hijas formen parte de la familia Spínola.
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